Contribuirán a fabricar paneles solares extremadamente flexibles, baratos, fáciles de manipular e instalables en cualquier superficie
Hoy, la nanotecnología permite manipular la materia a escalas inimaginables hasta hace unos pocos años. Dicha manipulación permite a los científicos e ingenieros dotar de propiedades únicas, muchas de ellas no disponibles en la naturaleza, a los elementos sobre los que se aplica. La modificación de las propiedades microscópicas (más precisamente nanoscópicas) tiene impacto en las propiedades macroscópicas y, por tanto, utilidad en muchos ámbitos. Sin duda es uno de los ámbitos tecnológicos con mayor potencial disruptivo y que tendrá aplicación tanto en la generación, como en el almacenamiento y transmisión de energía, sin dejar de lado la eficiencia energética.
Como ejemplo, la creación de estructuras a nanoescala permite obtener compuestos como el grafeno. Aunque como compuesto aparece de forma natural en pequeñas partículas en elementos tan cotidianos como la mina de un lápiz, la ciencia trabaja en controlar la síntesis de partículas de grafeno que formen estructuras mucho mayores, consiguiendo propiedades macroscópicas revolucionarias. La Universidad de Manchester es referente mundial en el uso del grafeno en aplicaciones relacionadas con la energía, trabajando, por ejemplo, en el desarrollo de baterías flexibles y ligeras, capaces de ir adheridas a la ropa y con un tiempo de recarga y una capacidad muy superior a la que presentan actualmente. Otro ejemplo son los supercondensadores de grafeno que, siendo livianos, son capaces de proporcionar cantidades masivas de energía. Esta universidad nos invita a imaginar un futuro en el que podremos recargar el teléfono móvil en segundos o la batería del vehículo eléctrico en cuestión de minutos. Otra aplicación prometedora del grafeno es la llevada a cabo en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y son las células solares flexibles y transparentes, capaces de adaptarse a cualquier superficie sin perder sus propiedades, prácticamente como una lámina adhesiva.
La apuesta global por la nanotecnología y por el grafeno es elevada, las expectativas grandes, y el potencial enorme, por lo que desde Norvento seguimos con atención los resultados que abren progresivamente nuevos caminos de aplicación a la tecnología energética.
De acuerdo con las palabras del Profesor Feynman: «En el fondo hay espacio de sobra».